Mónica Araya

Que no olvidemos nunca el valor de ser país alegre, unido y que respeta el juega limpio.

La Sele amplió la imaginación colectiva de lo que podemos lograr cuando un equipo trabaja unido, es disciplinado y se propone ganar.

Vivimos tiempos interesantes. Por tener un gobierno nuevo se respira aire fresco. Por tener frente a nosotros la insólita llegada a Zapote de un partido no tradicional. Por las redes sociales que alteraron el debate nacional. Y se observa una psicología ciudadana algo más abierta a lo positivo y lo cual puede abrir espacios para transformar el debate político y dejar de rumiar quejas contra el gobierno – o lo que sea.  Que poco a poco nos contagiemos de una idea vital: sacar el país adelante es tarea de todo el equipo nacional, no solo el gobierno de turno.

Y en materia de aspiraciones, el reto es insistir en que podemos aspirar a más: la política pública debe conducir a mucho más que la meta trillada del “aumentar el PIB” cada cuatro años.  Queremos otros goles.  Crecer mejor.  Notar aumentos en la calidad de vida. Ponernos al espejo como país y vernos con dignidad.

La Sele nos recordó el poder indiscutible del juego limpio y seremos sabios si lo aplicamos a las reglas del juego democrático.  El respeto a esas reglas está a la base de la Costa Rica a la que aspiramos. Una Costa Rica Limpia en cuanto a desarrollo y a las reglas.

Una Costa Rica que gana.

Una Costa Rica que conquista las mentes y los corazones.

Un país que avanza porque aprenderemos a valorar nuestros talentos y recursos –  incluidos los naturales.

¿Estará la Asamblea Legislativa de parte de nuestros sueños o los entorpecerá con ideas minúsculas?

Ese será el reto más tangible político de estos años. Eso, representantes de los costarricenses que no nos maten el sueño nacional.  Un sueño cada vez más nutrido desde una ciudadanía que urge que sea activa y valiente:  La ciudadanía que no se deja meter goles injustos y más bien anota los suyos.

Por ahora, en este dulce espíritu de junio,  con esa energía que la Sele nos transmitió, celebremos nuestro potencial de ganar, como sociedad, con esfuerzos más amplios del ámbito individual, familiar o institucional.  Vivimos un sentir costarricenses que ve ampliadas nuestras aspiraciones. De nosotros dependerá buscar más uniones y realizar las grandes hazañas pendientes.

¡Gracias Sele!

PS. Maravillosa foto tomada por Lindsay Fendt de The Tico Times. La foto de esta entrada fue tomada de este artículo.